domingo, septiembre 20, 2009

capsula del tiempo


Tuvieron como regla vital mezclarse con la montaña, ser tragados por ella. De ser posible, perder contacto con el mundo si asi les demandara la ocasión.

Al pie de la sierra, tras un mundo dominado por la palma africana y el calor como el mismo infiermo el tiempo no parece transcurrir. En la lontanaza una mujer lleva sobre su cabeza un canasto y un bulto con rumbo incierto.

Al tener la sensacion infinita que el camino no parece terminar en ningun lado llegamos a una aldea, que es compuesta por varias mas pequeñas. Un pedacito de civilizacion: iconos de partidos politicos adornan casas y a lo lejos se escucha una cancion conocida al ritmo de regetón. Alguien se ha tomado la molestia de importar del mundo las cosas menos indispensables...

Por fin, el contacto esperado. Muchos hombres vestidos de rojo recuerdo de la guerra. Sus camisetas dejan ver la figura joven de un tipo con un fusil otrora lider -no, Che Guevara no.- En sus espaldas, la consigna misma que perdura en sus corazones "...ex combatientes de la guerrilla..." con una historia singular: cumplieron su deber de ser tragados por la montaña con tal éxito que sus superiores perdieron contacto con ellos al firmar la paz y casi una década despues reciben la noticia, reacios a abandonar sus armas.

En sus ojos aún permanece esa chispa: el ideal del bien común, el derecho a la tierra y otras cosas por las que hace 30 años perdieron familia y derramaron sangre. Pero tambien hay incredulidad y les cuesta creer que el tiempo de la guerra se ha ido. Para ellos nada ha cambiado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario